Soñar y desear son dos conceptos que a menudo se confunden, pero tienen diferencias importantes.
Soñar se refiere a la experiencia de tener imágenes, sensaciones y pensamientos en tu mente mientras duermes. Los sueños pueden ser muy variados y a veces pueden ser difíciles de entender. Algunas personas creen que los sueños pueden ser una forma en la que nuestro cerebro procesa y organiza la información que hemos recibido durante el día.
Desear, por otro lado, se refiere a la sensación de querer algo con intensidad. Puedes desear cosas materiales, como un coche nuevo, o cosas más abstractas, como la paz en el mundo. Desear algo no necesariamente significa que lo obtendrás o que harás todo lo posible por conseguirlo, pero implica tener un fuerte deseo o anhelo por ello.
En resumen, soñar se refiere a la experiencia de tener sueños mientras duermes, mientras que desear se refiere a tener un fuerte anhelo o deseo por algo.