Los surfactantes (también llamados tensioactivos o tensoactivos) son útiles para reducir la tensión superficial entre dos fases de la materia.
Los tensioactivos iónicos son los agentes tensioactivos que contienen cationes o aniones en sus formulaciones.
Los tensioactivos no iónicos son los agentes tensioactivos que no tienen carga eléctrica neta en sus formulaciones.
Por lo tanto, la diferencia clave entre los tensioactivos iónicos y no iónicos está en su formulación.