La osmorregulación y la termorregulación son dos factores de la homeostasis.
La osmorregulación se refiere al proceso de mantener una presión osmótica constante dentro de los fluidos corporales manteniendo el equilibrio del agua.
La termorregulación es el proceso de mantener la temperatura interna del cuerpo en un valor constante, aunque la temperatura del ambiente externo sea demasiado alta o demasiado baja.