Estas tuberías están hechas de material termoplástico y se usan como reemplazos comunes para las tuberías de metal.

La principal diferencia entre una tubería de PVC y una tubería de CPVC está en la composición del material. Ambas tuberías están hechas del mismo material (cloruro de polivinilo) pero la tubería de CPVC es la versión clorada. Los CPVC se alteran por una reacción de cloración de radicales libres que aumenta el contenido de cloro de la tubería. Ambas tuberías están hechas de materiales termoplásticos. Sin embargo, las tuberías de PVC solo pueden manejar temperaturas de hasta 60 grados Celsius. Las tuberías de CPVC, por otro lado, pueden soportar temperaturas de hasta 93 grados Celsius, lo que la convierte en la opción más versátil.

Los PVC y los CPVC están hechos de materiales que se pueden moldear en diferentes formas para crear tuberías, accesorios, válvulas y otros suministros que pueden manejar líquidos. Tanto las tuberías de PVC como las de CPVC se pueden usar para diversas aplicaciones, pero las de CPVC se usan más comúnmente para la manipulación industrial de líquidos, ya que ofrecen una mayor resistencia y flexibilidad.

Las tuberías de PVC son la opción más económica. Sin embargo, el mayor costo de las tuberías de CPVC se justifica por su capacidad para manejar temperaturas más altas y más productos químicos, lo que las convierte en una opción viable.