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Sant Nicolau de Bellpuig, también conocida como la Iglesia de San Nicolás, es un impresionante edificio religioso que combina elementos góticos y renacentistas. Ubicada en Bellpuig, en la comarca de Urgell, esta iglesia es considerada un valioso tesoro cultural y está protegida como Bien Cultural de Interés Local.
La iglesia parroquial de Sant Nicolau se caracteriza por su única nave, acompañada de elegantes capillas a ambos lados. El techo está adornado con hermosas bóvedas de crucería compuesta, que le otorgan un aspecto majestuoso. En el interior, se encuentra un altar de diseño plano, con el presbiterio ligeramente elevado. A la izquierda, podemos apreciar la sacristía, que fue añadida en el siglo XVIII. Otro elemento destacado de la iglesia es la capilla vecina dedicada a los Dolores. En su interior, se albergan valiosas obras de arte, como la tabla de San Jerónimo, realizada entre los siglos XV y XVI, que destaca por su ejecución en pintura al temple. También se encuentra la tabla de San Agustín, que combina elementos góticos y renacentistas y es una muestra de la maestría artística de la época.
Los arcos torales y formeros, de medio punto, crean una armonía estructural en el interior de la iglesia. Los contrafuertes, aunque ocultos por las capillas laterales, desempeñan un papel esencial en la distribución interna del espacio. Un elemento de gran interés es el impresionante sepulcro funerario de Ramon Folch de Cardona, una pieza de mármol de estilo renacentista importada desde Italia. Su detallado trabajo escultórico es un testimonio de la grandeza artística de la época.
La entrada principal de la iglesia sigue los esquemas clásicos de los arcos de triunfo, con dos imponentes columnas que sostienen un entablamento. En el centro del entablamento, se encuentra un elegante frontón que alberga una hornacina. En su interior, se puede contemplar una figura esculpida de la Virgen María con el niño Jesús, una representación de gran devoción. Además, en la parte superior, destaca un pequeño rosetón que aporta luminosidad al conjunto arquitectónico. En la parte posterior de la iglesia, se alza un majestuoso campanario de seis caras, cada una de ellas con una ventana de arco apuntado para albergar las campanas.
El acceso a la iglesia se realiza a través de una elegante escalinata barroca, construida en 1792. Al ingresar al interior, encontramos una impresionante pila bautismal de piedra, compuesta por la pila misma, un pie, un pedestal y un zócalo. La pila tiene una forma gallada y está ricamente decorada con un friso adornado con relieves de querubines. La pila descansa sobre una columna de perfil balaustrado, que a su vez se encuentra sobre un sólido zócalo. Estas dos partes, aunque no pertenecientes a la misma época, fueron hábilmente unidas para crear una obra de arte cohesionada.
En la rectoría de la iglesia, se encuentra un armario que alberga la valiosa tabla de la Virgen de la Palma, una pintura al temple sobre tabla realizada en el siglo XVI. Esta obra de arte representa a la Virgen María con gran belleza y simbolismo, y es un tesoro que se ha preservado a lo largo de los siglos.
La visita a Sant Nicolau de Bellpuig es un viaje al pasado, donde se puede apreciar la fusión de estilos arquitectónicos y admirar la riqueza artística y espiritual que se encuentra en cada rincón de este emblemático edificio religioso.