Gestión de anfitrión airbnb en la Molina y Masella

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Gestión de anfitrión airbnb en la Molina y Masella

La estación de invierno de Masella surgió gracias a la búsqueda de nuevas pistas de esquí. Fue inaugurada en diciembre de 1967. Posteriormente se han añadido nuevas instalaciones mecánicas de acceso y pistas con diversos grados de dificultad desde el llano de Masella (1.600 m) hasta la cima de la Tosa (2.536 m). Un sector de las pistas está dentro del término de Das (Cóms y Coma Orihuela), aunque conectado desde el cabo del Bosque con la red general de teleesquís y con el llano de Masella por una carretera. En Masella se encuentran también diversas clases de alojamientos de alquiler vacacional y servicios (restaurante, sala de convenciones, autoservicio, tienda de venta y alquiler de material deportivo, instalaciones deportivas, servicio médico, etc.), y como ya se ha dicho, se conecta con la Molina mediante un remonte.

La estación de invierno de la Molina está situada a la salida del túnel del Cargol, bajo el collado de Toses, en la cabecera del río de Alp, dicho aquí riera de la Molina. En el collado de Toses estaba el antiguo Hostal de la Molina, documentado al menos desde la segunda mitad del siglo XVIII. En 1909 se hospedaron unos esquiadores del Centro Excursionista de Cataluña (como todavía no llegaba el tren, vinieron en carruaje desde Ribes de Freser). Esta excursión está en el origen del moderno barrio y estación invernal de La Molina. En 1911 se celebró la primera competición oficial de esquí, dentro del Tercer Concurso Catalán y Semana Deportiva de Ribes de Freser, y al año siguiente, en la primera internacional se otorgaron las copas de Alfonso XIII y del presidente de la República Francesa. En 1925, el Centro Excursionista de Cataluña inauguró su Chalet de la Molina, construido a medio aire de la sierra del Sitjar, en el camino de la colina de la Perdiu, en el lugar donde estaba el inacabado Porxo Nou del Sitjar. Los planos son del arquitecto Josep Danés. El Chalet fue arrendado a Pere Adserà que, junto a su familia, contribuyó mucho a su éxito en aquella primera época. Los años siguientes se fueron escalonando diversas construcciones: la capilla de la Virgen de Montserrat (1926), de estilo neorrománico, el garaje, un guardaesquís (1929), el Hotel de Pere Adserà (1936) y la ampliación del Chalet (1948). Los chalets particulares, la capilla de la Virgen de las Neus en Supermolina, hoteles y refugios de entidades excursionistas y de esquí se fueron escalonando por la montaña en tres zonas principales: la de la Estación y el Sitjar, la del Chalet del Centro y la de Supermolina o de Font Canaleta, unidas por la carretera de la Estación.

Las instalaciones actuales, que incluyen un circuito de esquí de fondo, constan de numerosos servicios (asistencia médica, establecimientos hoteleros, refugios, apartamentos, chalets particulares, restaurantes y bares, un centro comercial, una zona de patinaje, una guardería y parque infantil, etc.).