Al igual que todas las demás especies de antílopes y de ganado bovino, el saola es un animal herbívoro que sobrevive con una dieta que se compone únicamente de plantas y materia vegetal.
Aunque existen muy pocos registros sobre el saola en su entorno natural, se cree que se alimentan principalmente de las hojas de higo y otros árboles y arbustos que crecen a lo largo de las riberas húmedas. También se cree que el saola se alimenta de frutas, semillas y bayas, junto con hierbas. Casi siempre se encuentran cerca de una fuente de agua fresca y corriente, como un pequeño río o arroyo de montaña.