La enfermedad de Addison es un trastorno que involucra el funcionamiento interrumpido de la parte de la glándula suprarrenal llamada corteza. Esto resulta en una menor producción de dos químicos importantes (hormonas) normalmente liberados por la corteza suprarrenal: cortisol y aldosterona.
Las glándulas suprarrenales son dos glándulas, cada una colocada en la parte superior de los dos riñones. La parte externa de la glándula se conoce como la corteza. La parte interior es conocida como la médula. Cada una de estas partes de la glándula suprarrenal es responsable de producir diferentes tipos de hormonas.
El cortisol es una hormona muy potente producida por la corteza suprarrenal. Participa en la regulación del funcionamiento de casi todos los tipos de órganos y tejidos en todo el cuerpo y se considera una de las pocas hormonas absolutamente necesarias para la vida. El cortisol está involucrado en:
- El procesamiento y la utilización de muchos nutrientes, incluidos los azúcares (carbohidratos), las grasas y las proteínas.
- El funcionamiento normal del sistema circulatorio y del corazón.
- El funcionamiento de los músculos.
- El funcionamiento renal normal.
- La producción de células sanguíneas.
- Los procesos normales implicados en el mantenimiento del sistema esquelético.
- El buen funcionamiento del cerebro y los nervios.
- Las respuestas normales del sistema inmunológico.
La aldosterona, también producida por la corteza suprarrenal, desempeña un papel central en el mantenimiento de las proporciones adecuadas de agua y sales en el cuerpo. Cuando este equilibrio se altera, el volumen de sangre que circula por todo el cuerpo caerá peligrosamente, acompañado por una caída en la presión arterial.
La enfermedad de Addison también se conoce como insuficiencia adrenocortical primaria. En otras palabras, algún proceso interfiere directamente con la capacidad de la corteza suprarrenal para producir sus hormonas. Los niveles de cortisol y la caída de aldosterona, y numerosas funciones en todo el cuerpo se interrumpen.
La enfermedad de Addison ocurre en aproximadamente cuatro de cada 100.000 personas. Afecta a hombres y mujeres de todas las edades.