En el arte barroco se utilizaban varios tipos de materiales, algunos de los cuales son:
Madera: se utilizaba para la talla de esculturas y retablos.
Piedra: se utilizaba para la escultura en relieve y para construir fachadas y otros elementos arquitectónicos.
Bronce: se utilizaba para la escultura y para elementos decorativos como candelabros y apliques.
Plata y oro: se utilizaban para la orfebrería y para decorar objetos religiosos como cálices y reliquiarios.
Vidrio: se utilizaba para la creación de vidrieras.
Tela: se utilizaba para la pintura de telas, especialmente para pintar retratos y escenas religiosas.
Pinturas: se utilizaban para la pintura de cuadros, frescos y murales.
En resumen, se utilizaban una amplia variedad de materiales en el arte barroco, desde madera y piedra hasta metal y vidrio, y se combinaban en una gran variedad de técnicas para lograr un gran efecto estético y emocional en el espectador.