Si está cocinando fideos de arroz y está anticipando que sobrarán, no mezcle todos los fideos con la salsa.
La salsa puede reducir la vida útil de los fideos, ya que se echa a perder más rápido que los fideos en sí mismos cuando se guardan en el refrigerador, pero en el congelador, la salsa puede hacer que los fideos se vuelvan aún más húmedos cuando se descongelan.
Si es posible, también debe intentar cocinar los fideos sobrantes al dente, para que cuando se vuelvan a calentar, se puedan cocinar con la consistencia y textura perfectas.
Coloque los fideos sobrantes en un recipiente para el congelador. La mejor opción sería almacenarlos en una bolsa de plástico apta para el congelador, dejándolos planos para que no se forme hielo en el centro, lo que podría destruir la textura.
Congele porciones individuales en bolsas de plástico para colocadas planas, también puede apilarlas una encima de otra para ahorrar espacio en el congelador.
Coloque la salsa en un recipiente separado, ya sea en un Tupperware de plástico o en una bolsa de congelador, para así poder apilarlos junto con los fideos.
También puede optar por colocar los fideos en un recipiente hermético, mezclándolos ligeramente con un poco de aceite para que no se agrupen. Intenta no llenar demasiado el recipiente. Ya sea que use un recipiente o una bolsa de plástico para congelar, etiquete el recipiente e indique la fecha de almacenamiento.
Para aquellos fideos que ya se han mezclado con ingredientes también puede congelarlos pero no obtendrá los mejores resultados.