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Villanueva de la Cañada es un pintoresco municipio ubicado en la región noroeste de Madrid, rodeado por un entorno natural impresionante y con una historia intrigante que se remonta a siglos atrás. Su posición geográfica se define por su proximidad a localidades como Valdemorillo, Villanueva del Pardillo, Majadahonda, Boadilla del Monte, Villaviciosa de Odón, Brunete y Quijorna. La geografía de este lugar se caracteriza por una vasta llanura que se extiende sin la menor elevación topográfica, cruzada por los ríos Guadarrama y Aulencia, así como varios arroyos que contribuyen a su belleza natural.
El nombre de Villanueva de la Cañada tiene raíces históricas interesantes. En el siglo XV, este pueblo era conocido como «La Despernada» o «La Espernada», y existen varias leyendas sobre el origen de este nombre. Una de ellas sugiere que en tiempos antiguos, posiblemente en la época romana, había una estatua de piedra en el lugar donde se encuentra el pueblo actual, y esta estatua había sido mutilada por transeúntes que le rompieron las piernas. Otra leyenda cuenta que una princesa real se fracturó una pierna durante una cacería en la época feudal, y las casas que se construyeron en el lugar del accidente tomaron el nombre de «Despernada» o «Espernada» en memoria de la princesa. La versión de la princesa parece más plausible, ya que se sabe que los reyes de esa época construyeron cerca del pueblo, durante el reinado de Enrique IV, una Casa de Llanos que aún conserva restos de murallas en el término de Valdemorillo. Esta casa servía como refugio o parador real, y La Despernada estaba en el camino hacia esta residencia. Con el tiempo, el nombre se contrajo y se cambió a «La Espernada».
A principios del siglo XVI, el pueblo adoptó el nombre actual de Villanueva de la Cañada, debido a su ubicación estratégica en los caminos de tránsito de las cabañas de pastoreo que subían y bajaban de las montañas en diferentes épocas del año.
La Guerra Civil Española dejó una profunda huella en Villanueva de la Cañada, ya que la villa quedó prácticamente destruida durante el conflicto. Los edificios históricos que alguna vez adornaron la localidad fueron reducidos a ruinas, y gran parte de su patrimonio se perdió irremediablemente. Sin embargo, tras la guerra, se llevó a cabo un ambicioso proyecto de reconstrucción dirigido por la Dirección General de Regiones Devastadas en 1940. Este proyecto marcó el emplazamiento actual de Villanueva de la Cañada, y aunque la guerra dejó cicatrices profundas en su historia, también sentó las bases para su reconstrucción y crecimiento como una comunidad moderna y acogedora.
Hoy en día, Villanueva de la Cañada es un encantador municipio que combina su rica historia con un ambiente moderno y acogedor. Su extensa llanura y su proximidad a áreas naturales como la Sierra de Guadarrama y el Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama lo convierten en un lugar perfecto para los amantes de la naturaleza y los deportes al aire libre. Además, su legado histórico se refleja en rincones encantadores, como la Plaza de la Constitución, donde se encuentra el Ayuntamiento, y en la iglesia parroquial de Santo Domingo de Guzmán, que preside el centro del casco histórico. Villanueva de la Cañada ofrece un equilibrio entre la tradición y la modernidad, lo que lo convierte en un lugar ideal para vivir y visitar en la Comunidad de Madrid.