Cerca del 73% de la población total es cristiana, y la mayoría de la población es católica romana. Alrededor del 12% son musulmanes; siendo la mayoría de ellos extranjeros. Alrededor del 10% practica exclusivamente las religiones indígenas tradicionales, pero se cree que un gran número de cristianos y musulmanes también incorporan algunos elementos de las religiones tradicionales en su práctica. Alrededor del 5% de la población son ateos o no afirman afiliación religiosa.
La constitución establece la libertad de religión y este derecho es generalmente respetado en la práctica. Si bien las organizaciones religiosas no están obligadas a registrarse con el gobierno, muchas lo hacen para garantizar la plena protección de sus derechos constitucionales. El gobierno ha prohibido el registro de los testigos de Jehová desde 1970, pero el gobierno ha permitido que el grupo se reúna y practique su fe. Ciertas fiestas cristianas y musulmanas se celebran como fiestas nacionales.