La berenjena es una hortaliza que se cultiva principalmente durante los meses cálidos del año. La época de cosecha depende del tipo de berenjena y del clima de la región en la que se cultiva.
En general, las berenjenas se cosechan cuando los frutos han alcanzado su tamaño máximo y están completamente maduros. Esto suele ocurrir aproximadamente entre los 70 y los 90 días después del trasplante.
Para determinar si una berenjena está madura y lista para ser cosechada, se puede observar su tamaño y color. Las berenjenas maduras suelen tener un tamaño similar al de una manzana grande y un color verde oscuro. También pueden presentar una piel lisa y brillante.
Es importante cosechar las berenjenas en el momento adecuado para asegurar que tengan el mejor sabor y textura posibles. Si se dejan madurar demasiado, pueden volverse amargas o fibrosas. Por otro lado, si se cosechan demasiado pronto, pueden carecer de sabor y ser poco atractivas.
Es recomendable cosechar las berenjenas temprano en la mañana, cuando están frescas y húmedas. Se deben cortar con cuidado con un cuchillo afilado para evitar dañar las plantas.