Los macarrones y las penne son dos tipos de pasta que se diferencian principalmente por su forma y tamaño. Los macarrones son una pasta tubular que se corta en trozos más largos, mientras que las penne son una pasta corta y cilíndrica con puntas cortadas en ángulo.
Además, los macarrones suelen ser más anchos y redondos que las penne, mientras que estas últimas tienen una sección transversal más delgada y alargada.
Ambos tipos de pasta son versátiles y se pueden utilizar en una amplia variedad de platos, desde ensaladas hasta guisos y sopas. Sin embargo, debido a su forma única, las penne son especialmente adecuadas para salsas más espesas, ya que sus puntas cortadas en ángulo permiten que la salsa se adhiera mejor a la pasta. Los macarrones, por otro lado, son más adecuados para salsas más líquidas o para añadir a ensaladas y guisos.
En resumen, la principal diferencia entre los macarrones y las penne es su forma y tamaño. Los macarrones son más anchos y redondos, mientras que las penne son cilíndricas con puntas cortadas en ángulo. Ambas son opciones populares para una amplia variedad de platos, pero cada una tiene sus propias ventajas y se utiliza de manera ligeramente diferente en la cocina.