El whisky es una bebida alcohólica producida a partir de diferentes tipos de granos como trigo, centeno, maíz o cebada. El proceso implica la germinación, fermentación, destilación y envejecimiento de la mezcla en barricas de roble carbonizado. El whisky puede contener de 40% a 60% de alcohol. Su color puede variar de dorado claro a ámbar oscuro y puede tener un sabor ligero o un sabor espeso dependiendo de su edad.
El vodka es una bebida alcohólica incolora e insípida que generalmente consiste en agua y etanol rectificado. Está hecho de cualquier fuente que contenga almidón como la remolacha, las papas, granos, frutas o azúcar común.
El whisky se somete a un proceso de envejecimiento, mientras que el vodka no.