Hoy en día, el aceite de palma y de maíz son aceites comerciales y comestibles famosos que se utilizan en diversas industrias. Ambos aceites son una excelente fuente de materia prima utilizada para el biodiesel. Estos aceites tienen su papel principal en los sectores de la cocina y de la no cocina.
El aceite de maíz se elabora extrayendo el aceite del germen de maíz. El aceite de maíz contiene altos niveles de grasas poliinsaturadas, que son un componente eficaz para reducir los niveles de colesterol en la sangre. Se considera que es el mejor en su funcionalidad, sabor excepcional, precio y beneficios para la salud. El aceite de maíz se considera una fuente concentrada de energía que proporciona los ácidos grasos esenciales y la vitamina E.
Comercialmente, el aceite de maíz es uno de los preferidos en las industrias de alimentos de aperitivos y restaurantes. Además, está interesterificado con aceite vegetal totalmente hidrogenado para producir margarinas libres de trans. Industrialmente, el aceite está en la preparación de jabón, ungüento, pintura, tintas, textiles, nitroglicerina e insecticidas. El aceite de maíz también se utiliza como vehículo para moléculas de fármacos en preparaciones farmacéuticas.
El aceite de palma extraído de la pulpa de la fruta de la palma es un tipo de aceite vegetal comestible.
El aceite de palma está disponible en diferentes tipos: aceite de palma roja y aceite de palma refinado. El aceite de palma roja es beneficioso para la piel y otras aplicaciones cosméticas. No contiene colesterol y, por lo tanto, lo pueden consumir las personas que tienen colesterol alto. El aceite tiene propiedades antioxidantes y, por lo tanto, puede combatir los radicales libres en el torrente sanguíneo, lo que conduce a la prevención de algunas enfermedades cardíacas.
Naturalmente, el aceite de palma obtenido en procesos de alto calor es de color oscuro, en cambio, el aceite de palma refinado es de un color ligeramente neutro.
En los últimos años, el aceite de palma se utiliza como ingrediente en productos alimenticios como la margarina, los chocolates, el queso crema, papas fritas, galletas y batidos. Además, ha ganado gran demanda en las industrias de cosméticos para elaborar pasta de dientes, jabón y champú.
A nivel mundial, la producción de aceite de palma se está convirtiendo en una amenaza, ya que está causando la destrucción de los bosques tropicales. A medida que los árboles forestales se talan y se queman, la vegetación libera metano y otros gases de efecto invernadero a la atmósfera, lo que provoca una amenaza de contaminación.