Diferencias entre salsa de tomate y pasta de tomate

La salsa de tomate, también llamada salsa napolitana, se suele preparar salteando cebolla y pimiento en aceite de oliva y luego agregando puré o tomates picados y, a veces, agua. Tiene una consistencia fina que la hace ideal para platos como los espaguetis y la lasaña. Dependiendo de las preferencias de uno, también se pueden agregar condimentos y hierbas.

La pasta de tomate, por otro lado, tiene una consistencia más espesa que la salsa de tomate. Se elabora cocinando tomates durante un largo período de tiempo y luego quitando la piel y las semillas. El producto final es un concentrado rojo oscuro espeso. Debido a su consistencia, no agrega líquido a una receta, sino que agrega sabor. Su grosor también puede actuar como aglutinante. Se usa comúnmente como base para la salsa de pizza y la sopa de tomate, en cuyo caso también se puede diluir con agua.

Diferencias entre salsa de tomate y pasta de tomate

La salsa de tomate tiene una consistencia más delgada que la pasta de tomate. La pasta de tomate, por el contrario, es un concentrado espeso y solo debe usarse en pequeñas cantidades debido a su potente sabor.